A pesar de los cambios de reglas, Rusia y Telegram siguen en un callejón sin salida
2 minuto. leer
Actualizado en
Lea nuestra página de divulgación para descubrir cómo puede ayudar a MSPoweruser a sostener el equipo editorial. Leer más
Rusia tiene prohibió la popular aplicación de mensajería Telegram desde abril de este año. Esto se hizo debido a que los funcionarios de la compañía se negaron a entregar las claves de cifrado de sus mensajes al FSB para que la organización tuviera la capacidad de espiar todos y cada uno de los mensajes.
El fundador de Telegrams, Pavel Durov, expresó su firme oposición a esta política y dijo que “la privacidad no está a la venta y los derechos humanos no deben verse comprometidos por miedo o codicia”.
Hoy, Russia Today informa que el organismo de control del gobierno (Roscomnadzor) está dispuesto a levantar su prohibición, una vez que el FSB obtenga acceso total a los mensajes cifrados. Un abogado de Telegram argumenta en una entrevista que “[Telegram] nunca negó que las autoridades tengan el derecho e incluso la obligación de combatir el terrorismo. Por el contrario, sugerimos la única forma civilizada de hacerlo: una orden judicial a cambio de una divulgación. Una divulgación no del contenido de los mensajes, sino solo de una dirección IP o un número de teléfono. El equilibrio debe encontrarse entre la seguridad nacional y la privacidad”,
Durov publicó en su canal de Telegram el martes que estos cambios destacados anteriormente (compartir direcciones IP y números de teléfono) harían de la plataforma “un lugar menos atractivo para quienes la usan para difundir propaganda terrorista”.
A partir de ahora, Telegram sigue bloqueado en Rusia.